DKARY es un proyecto que surgió como resultado de la casualidad, debido a un gesto de amistad que Isabel Cerdà Valiente, la fundadora, tuvo con su amiga Mercedes del Valle al regalarle una pulsera elaborada con cristales japoneses Miyuki.
Mercedes le propuso ayudar a un grupo de mujeres en una zona de mucha pobreza en Lalibela, Etiopía, enseñándoles a elaborar estas pulseras. De esta manera, ellas han podido generar sustento digno para sus familias. Así nace el proyecto solidario DKARY.
El recorrido de DKARY
Esta organización creada por Isabel Cerdà se dedica a cubrir las necesidades básicas de una gran cantidad de niños en una zona muy pobre de Lalibela, Etiopía. Su creadora, al ver la belleza de la pulsera hecha con cristales japoneses miyuki y notar la dedicación que se requiere para poder elaborarlas, ya que son artesanales, se fabrican cristal a cristal y precisan de una paciencia y de un tiempo bastante considerable, se propuso enseñar a las madres de estos niños a realizarlas, en un proyecto solidario que les permita sustentar a sus familias por sus propios medios. De esta manera, Isabel llega a Lalibela en 2016 y, junto a un grupo de 20 mujeres, crea un equipo capaz de elaborar estas pulseras generando empleo, bienestar y felicidad. Las pulseras miyuki realizadas por las mujeres etíopes han sido todo un éxito en España, por lo que Isabel decidió expandir su proyecto a otras partes del mundo, con el fin de ayudar a las mujeres que sufren en algunas zonas del tercer mundo.
Mejorar el bienestar de las mujeres en la India
Después del éxito de las pulseras miyuki, la demanda superó en gran medida el nivel de producción, por lo que tomó la decisión de buscar un segundo lugar en el cual se pudiera implantar DKARY y continuar la producción. Finalmente, el país elegido fue la India. Existen zonas en ese país donde las condiciones de vida para las mujeres pueden ser extremas, dependiendo de la casta a la que pertenezcan. India es el país del mundo con mayor número de suicidios de mujeres menores de 49 años y sus condiciones de vida son extremadamente duras. Esta circunstancia motivó a Isabel a ayudar a mujeres con diferentes grados de discapacidad física. La finalidad del proyecto es poder llevar este proyecto solidario hasta ellas. De esta manera, DKARY contribuye en el bienestar de estas mujeres, dándoles una fuente de trabajo que ha demostrado ser un éxito, mejorando su calidad de vida y al mismo tiempo contribuyendo con un mejor futuro para ellas y sus familias.
